Fundación ProAves – por la conservación en el país de las aves

COMIENZA CAMPAÑA PARA PROTEGER LA PALMA DE CERA

2 March, 2006

Español

El 3 de marzo de 2006 se presentó en el Jardín Botánico la Campaña “Reconcíliate con la Naturaleza”


{{COMIENZA CAMPAÑA PARA PROTEGER LA PALMA DE CERA}}

• La idea es preservar esta especie única en el mundo

• Con ello se conserva el hogar del loro orejiamarillo, críticamente amenazada

Bogotá, 1 de marzo de 2006.- Con el propósito de prevenir la tala indiscriminada de la Palma de Cera, nuestro árbol nacional, el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, el Departamento Técnico Administrativo del Medio Ambiente (Dama), el Jardín Botánico José Celestino Mutis, Conservación Internacional y la Fundación Proaves, con el apoyo de la Conferencia Episcopal Colombiana, presentaron la campaña {{“Reconcíliate con la Naturaleza”}}.

Esta iniciativa busca que los colombianos tomen conciencia de la responsabilidad que tiene cada uno de los habitantes del país en la protección y conservación de los recursos naturales.

“Con esta campaña, producto de un esfuerzo interinstitucional de entidades gubernamentales y no gubernamentales, queremos hacer un llamado para que el Domingo de Ramos usemos un tipo de palma distinto a la Palma de Cera como es el caso de especies de palma como la Iraca o la Areca. Con esto protegemos una especie amenazada y por ende ayudamos a conservar el hogar del loro orejiamarillo, que la habita”, dijo la ministra de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, Sandra Suárez Pérez, al presentar la campaña.
De acuerdo con los expertos, las especies que cuentan con las características adecuadas para este propósito son Iraca ({Carludovica palmata}), especie nativa de amplia distribución y que podría constituir la materia prima para la elaboración de ramos; Areca ({Chrysalidocarpus lutescens}), y Alejandra ({Archontophoenix alexandrae}), especies introducidas que podrían utilizarse como plantas vivas, durante la celebración.

Para Fabio Arjona director Ejecutivo de Conservación Internacional, “Reconcíliate con la Naturaleza” es el resultado de una gran alianza, que suma los componentes científico, social, económico y religioso, donde se aportan soluciones prácticas que validan públicamente la intención de proteger las especies silvestres amenazadas de nuestro país”.

La importancia de la campaña se fundamenta en la conservación de una especie única en el mundo y que Colombia tiene el privilegio de tener.

De acuerdo con información suministrada por el Jardín Botánico José Celestino Mutis, la Palma de Cera ({Ceroxylum quindiuense}) se encuentra únicamente en Colombia y crece principalmente en las cordilleras, de los 2.000 metros de altitud para arriba.

Esta palma, que tiene un proceso de regeneración demasiado lento, es una de las 11 especies en el mundo y una de las siete que se encuentran en Colombia. La palma de cera es la más alta del mundo y alcanza hasta 60 metros de altura, con un promedio de vida de 100 años.

{{HISTORIA}}

Las primeras 30 palmas de cera plantadas en Bogotá, fueron traídas desde el departamento del Quindío a comienzos del siglo pasado. Se sembraron en el parque de la Independencia, en la calle 26 con carrera 7ª, como símbolo de libertad y autonomía.

Desde 1998 el Jardín Botánico de Bogotá ha sembrado palmas de cera en el parque Simón Bolívar, calle 63, biblioteca Virgilio Barco, parque El Renacimiento, avenida Caracas con 11 sur, Coldeportes, calle 170 con autonorte y calle 170 con carrera 7. Una de las más hermosas se encuentra en la Avenida Chile (calle 72) con carrera 7.

Según el Departamento Técnico Administrativo del Medio Ambiente (Dama), en la capital de la República, el aprovechamiento de la Palma de Cera se efectúa de manera ilegal, porque de acuerdo con la Ley 61 de 1985 está vedada.

El empleo de otras palmas como la Palma de Vino o Palma Real se hace de manera legal, pero la presión a que se somete en época de Semana Santa puede llevar al deterioro de ecosistemas y a la baja de la oferta ambiental para especímenes de la fauna silvestre que cohabitan con ellas.

Por estas circunstancias, el Dama, en coordinación con los diferentes organismos de control como la policía Ecológica y Ambiental, DIJIN, SIJIN y DAS, ha desarrollado desde 1996 campañas tendientes a proteger las diferentes palmas empleadas para la elaboración del ramo consagrado en la semana santa.

Este año se realizarán operativos de control en la central de abastos y en las plazas de mayor comercialización con el objeto de detectar la movilización y venta ilegal de ramos de palma a utilizarse el domingo de ramos.

Desde 1997, el Dama han decomisado 4515 bultos de Palma Atalea o Palma Real, debido a carecen de los salvoconductos respectivos de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR).

{{SITUACIÓN DEL LORO OREJIAMARILLO}}

La Palma de Cera, considerada amenazada por su explotación ilegal tiene una estrecha relación ecológica con el Loro Orejiamarillo, ave catalogada como críticamente amenazada por la Unión Mundial para la Naturaleza {{(UICN)}} e incluida en el apéndice I de la Convención Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora {{(CITES)}}.

Según datos oficiales de la Fundación ProAves, para el año 2005, sólo quedan 533 loros de esta especie en Colombia y son altamente dependientes de la Palma de Cera, debido a que encuentran en ella el alimento necesario, un lugar de dormitorio comunal y el espacio ideal para anidar. En Ecuador lamentablemente las poblaciones de loro orejiamarillo hoy están desaparecidas.

Este tipo de loro, según proyecto liderado por ProAves, ha tenido un incremento cercano al 300% en su tamaño poblacional. Desde 1998 presentó una tasa estimada de 188 individuos, diezmados por la explotación de la Palma de Cera, lugar único donde éste loro anida.

Con un fuerte trabajo en labores de educación ambiental, investigación y conservación en los municipios de Roncesvalles (Tolima) y Jardín (Antioquia), el loro orejiamarillo presentó una tasa de crecimiento hasta la fecha de 533 individuos.

Estos registros corresponden a metodologías de muestreo estandarizadas y constantes por cada mes en el año, principalmente conteo en dormitorios y sitios de forrajeo.