La campaña, que es liderada por Conservación Internacional Colombia y ProAves y que cuenta con el apoyo de {{[Loro Parque Fundación->http://www.loroparque-fundacion.org/]}} y de {{[American Bird Conservancy->http://www.abcbirds.org/]}}, tuvo la presencia, en el acto de inauguración celebrado en el Jardín Botánico de Bogotá José Celestino Mutis, de la entonces Ministra de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, Sandra Suárez, del Secretario General de la Conferencia Episcopal de Colombia monseñor Fabián Marulanda López, y de varios directores de organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, así como de público en general y periodistas.
Posteriormente realizó otras actividades en Bogotá y se extendió a catorce municipios y 25 veredas de Antioquia, Caldas, Tolima y Quindío, donde llevó a cabo 161 actividades de educación ambiental y atendió 109 nueve instituciones educativas.
Entre las actividades realizadas por la campaña, que este año llegó a su quinta versión consecutiva, se encuentran talleres, salidas de campo para la observación y monitoreo de loros, obras de teatro y títeres y eventos de capacitación, que contaron con el apoyo de docentes, educadores ambientales de la Fundación ProAves, líderes comunitarios, niños y jóvenes de los Grupos Ecológicos Amigos de las Aves y del Servicio Social Ambiental, y observadores de aves.
Paralelamente se repartieron 23 mil 896 unidades de materiales impresos, entre afiches, stikers, volantes, colecciones de mini-guías, adhesivos de diferentes motivos, separadores de libros, gorras y recordatorios.
Finalmente, en Bogotá, el Instituto Educativo Distrital Integrado de Fontibón adoptó, como eje de su Proyecto Ambiental Escolar (PRAES), el conocimiento y conservación de la Palma de Cera y el Loro Orejiamarillo.
{{Impacto general de la campaña}}
Como producto de sus cinco años de existencia, esta iniciativa ha alcanzado grandes resultados acumulados, principalmente un reemplazo progresivo del uso de la Palma de Cera en el tradicional ramo de la Semana Santa, por especies vegetales alternativas como la palma de Iraca o la de Areca, o por plantas vivas. A ello han contribuido de forma definitiva las organizaciones participantes, en especial la Conferencia Episcopal. Este logro ha contribuido significativamente al aumento de la población del Loro Orejiamarillo.
Fuera de nuestras fronteras, la campaña ha logrado tal reconocimiento que la organización Aves y Conservación, del Ecuador, y su Ministerio de Ambiente la replicaron con éxito.
Para todos los logros mencionados ha sido decisivo el apoyo de las siguientes instituciones: Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, Fondo para la Acción Ambiental y la Niñez, Comisión Nacional de Televisión, Eco Films Colombia, corporaciones autónomas regionales, alcaldías de Riosucio, Roncesvalles, Jardín y Génova, DAMA, Misión Bogotá, Instituto de Ciencias Naturales, Jardineros Ltda., Academia Artes de la Comunicación – ARCO, Sociedad de Autores y Compositores – Sayco y Red Nacional de Jardines Botánicos.