Pumas, osos de anteojos, pavas, dantas, venados y tororois han sido captados por las cámaras trampa instaladas en las Reservas Loros Andinos de ProAves y El Mirador reserva propiedad del Municipio de Génova. Su presencia muestra el valor biológico de las áreas protegidas e incentiva a tomar acciones que garanticen su protección.
La Fundación ProAves implementó el uso de las cámaras trampa para registrar patrones de comportamiento y actividad de las especies, forrajeo, áreas del forrajeo, sistemas sociales y partición de nicho; comportamiento alfa, uso de hábitat y corredores.
Las dos reservas hacen parte del Corredor de conservación Loros Andinos Amenazados de la Cordillera Central, el cual se encuentra ubicado entre los Municipios de Roncesvalles, Tolima y Génova, en el departamento del Quindío.
El uso de la fotografía para el estudio de la fauna silvestre se ha incrementado a menudo con las investigaciones, no solo disminuye el esfuerzo de trabajo de campo sino que también reduce la perturbación a la fauna silvestre monitoreada, a diferencia de otros métodos utilizados como el uso de collares, transmisores y trampas de captura.
En los últimos años la fundación ProAves ha incrementado el uso de las cámaras trampa para investigación, éstas se instalan en arboles cercanos a las entradas a madrigueras, o corredores de paso de las especies, su uso ha permitido que se obtengan mayores registros de la riqueza de especies que se distribuyen en las áreas protegidas, obteniendo imágenes de mamíferos medianos y grandes, al igual que especies sigilosas, nocturnas o difíciles de observar.
Es importante continuar con esta iniciativa de esta forma obtenemos información actualizada y veraz sobre la historia natural de las especies, su rango de distribución en las zonas de reserva además de fotografías de buena calidad.